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viernes, 4 de noviembre de 2016

11 semanas con la dieta, halloween, resonancia y confesiones personales

Hola otra vez!

Como siempre, empiezo hablando de la dieta, esta semana he adelgazado 700gramos, poco a poco, yo lo voy notando en volumen, de momento, como dije, ahora mismo no lo sigo a rajatabla, en cuanto nos instalemos en el nidito lo llevaré con menús semanales y más organizados. Pero bueno, aunque sea lento voy bajando y manteniendo.

He de decir que Halloween me encanta, y ya que es algo que comparto con mi marido, nos encanta maquillarnos y disfrazarnos, y la verdad es que nos lo pasamos bomba! Este año al final no surgió ningún plan con nuestros amigos, asi que al final decidimos ir a ver un túnel del terror que vimos anunciado por Facebook, la verdad es que no estuvo mal pero fue un poco duro aguantar las colas y el frio de la sierra, pero bueno, fue un rato agradable que pudimos compartir con mi cuñada.

Este miércoles me tocaba resonancia después de casi un año, ya que he tenido dos brotes y he empeorado bastante (según como yo me siento ) me da un poco de respeto conocer el resultado, pero bueno, el día 2 de diciembre sabré que pasa por mi cabeza y como van las cosas. 
No se si os pasa, pero yo me pongo bastante nerviosa, no suelo ser claustrofobica, de hecho alguna vez me he quedado encerrada en un ascensor y no me ha pasado nada, pero las resonancias, no se porque, pero me agobian bastante, aunque esta vez ha sido una de las mejores la verdad, el médico que me atendió era muy agradable, le pedí que si podía hablarme durante la prueba, y la verdad es estuvo muy atento, además esta vez no me pusieron vía para el contraste.

Me hicieron la primera tanda sin contraste, luego me sacaron un poco de la máquina y me inyectaron el contraste en vena pero con una aguja súper finita, casi ni me enteré, y luego otra vez para dentro de la máquina y segunda y última tanda ya con el contraste. Fueron 40 minutos de prueba pero se me pasaron bastante bien. 
Como siempre cuando terminó estaba mareada, pero el médico me acompañó a donde me tenia que cambiar, porque claro, a la sala de resonancia no se puede pasar con bastón, y encima iba sin gafas, un show verme andar...jajaja
Pero vamos a la salida mi suegra me invitó a desayunar un té y una tostada con tomate y jamón serrano que me dejó nueva.

Quería aprovechar que hablo de resonancias para preguntar si cuando os han hecho una os han dicho que teníais que ir en ayunas, porque en el hospital en el que estaba antes no me dijeron nunca nada y aquí siempre me insisten mucho en que debo acudir con 6 horas de ayuno. Así que tengo esa duda. Y de paso, si os apetece también podéis compartir que tal lleváis el tema de las resonancias, el contraste y ese tema.

Y bueno, como he puesto en el titulo, también me veo en la necesidad personal de plasmar algunas cosas por escrito, por dos razones, una para desahogarme, que no suelo hacerlo la verdad, todo me lo trago siempre, y otra para dentro de un tiempo leerlo y ver que las cosas han mejorado y que luchando todo puede ir a mejor y aunque no sea perfecto puedes conseguir al menos sentirte algo mejor contigo mismo y aprender a ser feliz con las cosas que puedas hacer.

Desde que empecé el blog, no sabía muy bien como lo iba a llevar, y al principio me costaba mucho ser constante, con los altibajos de fatiga y salud me ha sido imposible como habéis comprobado. Pero la verdad es que le he cogido mucho cariño al blog, solo llevo 4 meses pero hay mucho de mi, no tanto como me gustaría, pero para eso escribo esta entrada.

Mi salud en estos 2 últimos años ha empeorado bastante por situaciones de estrés e inestabilidad. Desde 2010 he vivido en varias casas hasta el punto de que ahora mismo siento que no pertenezco a ningún sitio...me siento sin identidad y sin un lugar al que pertenecer, todo esto no quiere decir que donde he vivido y vivo ahora este mal, simplemente es que no tengo mi espacio, no se muy bien como expresarme. Por eso tengo que agradecer a mi familia (mis padres) por el esfuerzo tremendisimo que están haciendo por ayudarnos a Rubén y a mi a poder tener nuestro nidito y también quiero agradecer a mis suegros por acogernos durante casi 1 año en su casa, se que todo a veces se complica pero al final la familia aunque te toca una al final solo vale la que tu eliges, con el tiempo eso lo he aprendido demasiado bien, ya que desde pequeña (con 10 años) perdí a mi abuelo materno, que aunque no tenía demasiada relación porque el pobre siempre estuvo muy enfermo, era la primera persona cercana que moría y fue el shock de saber qué es la muerte y asumir que ni veras mas a esa persona ni hablaras con ella ni absolutamente nada. Después empecé a tener muchísimo miedo de perder a mis abuelos paternos, ya que me he criado mucho con ellos, par mi, mi abuela era como una segunda madre.
Al final fueron muriendo mis personas mas queridas , mis tíos abuelos, hermanas de mi abuela paterna y sus maridos, gracias a ellos y mis abuelos paternos soy y tengo la esencia que tengo, eso me ha ido convirtiendo en una persona cada vez menos cariñosa y más cerrada, ya que muchas veces me he encontrado sola, amistades que te defraudan, gente que piensas que siempre estará ahí resulta que no, y el mundo se te cae encima. En mi adolescencia pase una época terrible, de hecho hasta hace 1 año no podía hablar de mi abuela sin llorar a mares, y murió en 2009. 

Mi primer cambio fue irme a vivir con mi abuelo, ya que tras la muerte de mi abuela se abandonó y había que echarle una mano para cocinar, por aquel entonces mi abuelo tenia 87 años, actualmente tiene 93 y contando.

Luego, vino el diagnostico y la prohibición de tener a mi cargo a mi abuelo, con lo cuál volví a mi casa y al tiempo, se vino a vivir Rubén.

Y el 23 de Enero de 2016 tuve que abandonar mi casa (de mis padres), por motivos muy fuertes para mi. Todo mi mundo (mi habitación, sentimientos,etc) se derrumbaba para mudarme a casa de mis suegros, algo que iba a ser temporal, y al final se ha convertido en 9 meses y contando.

Rubén y yo tenemos la esperanza de conseguir una estabilidad y un hogar en el nidito y poder tener un año 2017 un poco más tranquilo, aunque este año creo que siempre quedará en nuestra memoria, por nuestra boda, tanto movimiento, la obra del nidito,etc.

En general quiero transmitir que cuando los médicos te dicen que tienes que tener una estabilidad, una tranquilidad, tienen toda la razón, yo llevo varios años de brotes y empeoramientos por la situación de estrés y porque muchas veces me niego a asumir como estoy, intento ignorar mi situación y a veces fuerzo la máquina hasta no poder ni andar, por ejemplo ayer, después del último brote, salí a la calle sola por primera vez, y no solo eso, cogí dos autobuses para ir a la obra del nidito, subí a varios pisos (por las escaleras, no hay ascensor), pasé bastante rato de acá para allá, luego volví a comer (me acercó una amiga de mis padres) y caí rendida en la cama, a las 17h mi suegra me acompañó en metro (más escaleras y pasillos) a la FEMM ya que me tocaba psicóloga, terminé a las 19:30, ahí ya me dolía la cabeza, asi que nos pasamos por un bar que hay al lado y tomamos algo para poder tomarme un nolotil, luego metro de vuelta, con sus dos transbordos, mas escaleras, mas pasillos, ahí mi pierna derecha empezó a tener un poco de espasticidad y a doler, pero bueno, al llegar a nuestra estación hay un montonazo de escaleras para salir a la calle, hay ascensor pero lleva varios meses en obras asi que nada, a subir como podía, tardé un montón, luego una cuesta enorme y empinada para subir hasta la calle de la casa, ya mi pie se arrastraba e iba por libre...asi que cuando llegamos al portal no podía mas y le dije a Rubén que necesitaba sentarme antes de subir al primero, pero al final me costo una barbaridad subir. 
Consecuencia: una noche con una espasticidad tan grande que no me podía dormir, me he despertado pronto y he seguido durmiendo pero a trompicones, y aun asi sigo agotada.

Cambiando un poco de tema, mañana voy al pase solidario de la película "100 metros" sobre la esclerosis múltiple, y creo que voy a llorar todo el rato, porque aunque ni mucho menos corro, pero os aseguro que tengo un iron man muy duro para mi, el vivir día a día y no rendirme, que aunque lo pienso todos los días, el dejar el blog, el no salir, el dejar la dieta, etc. Siempre encuentro un motivo para seguir y eso me cuesta tanto o más como subir ayer por la noche a casa.

Hoy se me ha ido de las manos la entrada y ha quedado un poco larga, pero he abierto mi corazón de par en par.

Muchas gracias por dedicar un ratito a leer esto.

Laura Owl

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